No consuma alimentos crudos.
Consuma 5 a 6 comidas al día.
Coma despacio y mastique bien los alimentos.
Utilice carnes magras, pescado, pollo sin piel y margarina; evite consumir comidas grasas.
Utilice aceites vegetales para preparar los alimentos (maíz, girasol, soya, o de oliva para las ensaladas).
Utilice productos lácteos descremados (por ejemplo: queso bajo en grasa). Estos deben ser pasteurizados y se deben evitar los lácteos no autorizados o adquiridos en la calle.
Evite pedir comida a domicilio. Si va a comer fuera, seleccione un lugar conocido donde le brinden el máximo de higiene y seguridad. Solicite alimentos recién preparados y frescos.
Consuma los alimentos recién preparados y bien cocidos (no preparaciones recalentadas).
Evite preparaciones con huevo, pescado o carnes CRUDAS.
Cuando su médico autorice ingerir alimentos crudos, No consuma ensaladas de verduras y frutas en la calle. Evite las frutas que tienen la cáscara deteriorada.
Verifique que los alimentos estén en perfecto estado y revise siempre la fecha de vencimiento.
Para la desinfección de frutas, verduras, vajilla, utensilios y recipientes de cocina (excepto metálicos: aluminio, acero inoxidable, entre otros), utilice:
solución desinfectante preparada de la siguiente manera: por cada litro de agua adicione 3 a 5 gotas de lavandina utilizando un dosificador.
Sumerja el alimento por 15 minutos en la solución desinfectante, retírelo y deje secar.
Consuma agua envasada o previamente hervida (hervirla cada día).